Ezequiel González, chef Ejecutivo de Saurus Restaurant, eligió una receta que nos dejo contentos a muchos: alfajores estilo marplatenses, relleno de sabroso dulce de leche y bañado en chocolate semiamargo.
¿Un poco de historia?
El alfajor llegó a América con los españoles en el siglo XV, de origen árabe-magrebí y con una receta muy distinta a la conocida en la actualidad.
En Argentina existen registros que sitúan al alfajor a fines del siglo XVIII y principios del XIX en Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, con diferentes formatos y rellenos.
Con el correr del tiempo, el alfajor se transformó en un ícono argentino como el dulce de leche, el asado o la yerba mate. En Mar del Plata se escribió gran parte de la historia importante de la golosina más consumida en el país.

Actualmente se vinculan a una marca en particular, pero la historia empezó mucho antes en una confitería llamada Pueyrredón a fines de los años treinta del siglo pasado. La idea fue de Manolo Larrea que vendía los alfajores sueltos o en cajas de papel madera (costumbre que mantuvieron varias confiterías y/o panaderías hasta los ´90).
A comienzos de los ´40 empiezan a aparecer otros nombres, uno de ellos terminaría cambiando la historia del alfajor en Argentina.
Apenas iniciada la década abre sus puertas La Central, una confitería que empezó elaborando alfajores de estilo santafesino bajo la marca Mar del Plata, aunque luego cambió a un formato más parecido a los actuales.
En 1947, el griego Demetrio Elíades, el santafesino Benjamín Sisterna y el italiano Luis Sbaragalia -quienes tenían experiencia en el mundo de los alfajores en Buenos Aires-, tras innumerable cantidad de pruebas junto al maestro pastelero Toribio González, dan con la fórmula del mítico alfajor Havanna. Dos galletitas rellenas con mucho dulce de leche y cubiertas con el más puro chocolate semiamargo (o merengue italiano en el caso de los alfajores blancos), marcaron un punto de inflexión en el mundo de los alfajores.
Lo que siguió es historia conocida. Fue la compra obligada de cuanto turista pisó Mar del Plata, y lo sigue siendo más allá que ahora también se consiguen en casi toda Argentina, en Estados Unidos, España, Brasil, Uruguay y Chile, entre otros países.
La particularidad es, sin duda, el dulce de leche que une dos masitas que se cubren con el más puro chocolate semiamargo. Ya ahora, los alfajores que se venden en todas partes del país pueden hacerse en casa.
INGREDIENTES
Baño de chocolate
Chocolate semiamargo 250 gr
Relleno
Dulce de leche c/n
Ron ½ vaso

Masa
Miel 50 gr
Almidón de maíz 100 gr
Harina 0000 400 o 500 gr
Manteca 200 gr
Extracto de malta 40 gr
Azúcar 200 gr
Bicarbonato de sodio 5 gr
Cacao amargo 20 gr
Huevos 2
Ralladura de 1 naranja
Ralladura de 1 limón
Esencia de vainilla 1 cdta