Desde Lanús surgió un invento que promete revolucionar el mercado de la movilidad urbana. Se trata de la bicintacleta. La idea surgió en plena pandemia de la mano de Aníbal Querol, quien se preguntó qué pasaría si unía una cinta para caminar con una bicicleta.
La historia de Aníbal está vinculada al ciclismo desde pequeño ya que su abuelo, hace más de sesenta años, comenzó un emprendimiento dedicado a la fabricación de cuadros de bicicletas. Aníbal es la tercera generación en esa empresa y en 2020, a raíz de la gran demanda de bicicletas que hubo, dejó volar su imaginación y gracias a su conocimiento diseñó este novedoso medio de transporte.
En diálogo con LU5, Aníbal explicó que es muy simple el uso de la bicintacleta: funciona como una cinta de caminar, ya que se debe caminar en vez de pedalear y enseguida toma la velocidad de una bici común. Además, si el usuario corre arriba de la cinta, se puede alcanzar una velocidad de 30 kilómetros por hora.
Por otra parte, destacó que se puede usar también como cinta caminadora fija en la casa con solo añadirle unos caballetes. Por último, Querol comentó que los que deseen comprar este novedoso medio de transporte argentino cuyo valor, pueden hacerlo a través de las redes sociales (@bicintacleta en Instagram y Facebook).