Una insólita muerte sorprendió a los vecinos de la villa cordillerana ayer por la mañana. Robinson Gatica resultó muerto con un disparo luego de ser reducido por efectivos de la Policía que respondían a un llamado por violencia de género.
A pedido dela fiscalía, la Gendarmería está investigando el accionar de la Policía en el caso. Por el hecho, cuatro efectivos policiales fueron apartados de sus puestos mientras avanza la causa.
El abogado Cristian Hugo Pettorosso, quien asumió la defensa del policía que efectuó el disparo, aseguró “estoy convencido que el policía ha salvado no solo su propia vida, sino también que evitó una tragedia mayor“.
Paola Chumuy, la esposa de Robinson, relató que el hombre no agredió a los uniformados porque ella misma le había sacado el cuchillo.
En diálogo con LU5, Paola dijo que cuando llegaron los agentes les pidió que ingresaran para reducirlo, pero no lo hicieron. Ella logró sacarle el arma blanca y se fue del lugar, tras lo cual entró la policía y, según dijo, lo mató.
“Yo quiero desmentir lo que dijo el abogado del policía, que Robin lo agredió y por eso le pegó el disparo, porque es mentira. Yo le saqué el cuchillo y lo tiré afuera. Y después ellos entraron cuando yo no estaba en mi vivienda ni mis hijos y nadie corría peligro”, relató Paola.
“Cuando llego a casa, me encuentro a mi marido tirado en el piso, ya estaba muerto. La policía no me quería dejar entrar. Yo me metí nomás, le tomé el pulso y estaba muerto. Lo tenían esposado muerto“, aseguró la viuda de Gatica.
La mujer contó que su marido tenía serios problemas de adicción y que hace algunos años había tenido inconvenientes con los uniformados por situaciones similares.
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