Los miércoles en el programa Viento a Favor, la periodista Ailín Trepiana presenta “Bellas y Fuertes”, columna de género, en la que se analizan temas de actualidad desde una mirada feminista.
Ailín nos invitó a repasar el rol de la mujer en el ámbito laboral hasta lograr poder incorporarse en determinados rubros que históricamente habían estado masculinizados.
“El mundo laboral empieza prácticamente con hombres y mientras van transcurriendo los años las mujeres empiezan a insertarse; primero en algunos rubros vinculados con lo doméstico, pero poco a poco también con la llegada de la educación universitaria”, comentó.
“La mujer aparece en el mundo de la industria en el siglo XIII y tiene un papel importante desde el siglo XV, especialmente trabajando como hilanderas y tejedoras. Eran mano de obra barata en estos dos rubros y sólo eran aceptadas para estos trabajos mujeres jóvenes y solteras”, destacó Ailín.
Señaló además que era un mercado de trabajo que reproducía una división sexual del trabajo; considerado como natural y propia del ámbito familiar. Cuando el trabajo era en la esfera pública era considerado exclusivamente cosas de hombres, o sea los hombres eran los que se podían mostrar públicamente trabajando mientras que el trabajo doméstico quedaba bajo responsabilidad de las mujeres y en el ámbito privado.
Hacia mediados del siglo XIX en nuestro país, en Argentina había unas 140.000 mujeres que eran costureras, lavanderas, planchadoras, amasadoras, entre otras cosas. Estaba instituida la idea de que los salarios que tenían los hombres tenían que ser suficientes no sólo para el auto sostén sino también para sostener una familia. Mientras que los salarios de las mujeres se suponía que no tenían que superar lo suficiente como para su propio sustento, o sea no tenían que alcanzar ni siquiera para ellas mismas y justamente generaba esta dependencia siempre del sueldo del hombre.
A fin de siglo, del siglo XIX, se empezaron a anotar las primeras mujeres universitarias en otras profesiones como farmacéuticas, médicas e ingenieras. El siglo XX fue el que marcó la mayor cantidad de hitos importantes en relación a los logros de los derechos de las mujeres. En 1914 el 21% de las mujeres formaba parte de la población trabajadora; es decir que una de cada cinco mujeres trabajaba.
Estas mujeres que trabajaban eran principalmente personal doméstico, cocineras, lavanderas, planchadoras, costureras, modistas, tejedoras y trabajadoras agrícolas. Había muy pocas maestras y docentes y también pocas mujeres obreras que trabajaban en fábricas y talleres.
Por esta época es que además se conmemora por primera vez el Día Internacional de la Mujer Trabajadora que conocemos como el 8 de marzo.
Mujeres que marcaron la historia
La primera abogada que tuvo nuestro país se llamó María Angélica Barreda. Tenía una frase que ella decía era “no se puede volver atrás para destruir una conquista. la mujer ha ganado su puesto y nadie puede estorbarle el paso”.
Barreda, la primera abogada del país, nació el 16 de mayo de 1887 y se recibió de abogada a los 22 años en la Universidad Nacional de La Plata. Tuvo muchos obstáculos para que le den el título y hubo toda una batalla judicial que ella tuvo que enfrentar para que le reconozcan el título. Su caso llegó a la Suprema Corte Bonaerense y hubo un fallo dividido. Finalmente le otorgaron el título de abogada.
María Angélica también fue una importante activista en la lucha por los derechos de las mujeres y formó parte de la Asociación de Universitarias Argentinas
La primera periodista del país. Petrona Rosende de Sierra es considerada la primera periodista porque fundó un periódico que estaba dirigido para mujeres. Aunque era uruguaya estaba nacionalizada Argentina.
El periódico se llamaba La Aljaba y el lema de este periódico era ´nos libraremos de la injusticia de los demás hombres solamente cuando no existamos entre ellos´.
Fundó este diario que se publicó desde el 12 de noviembre de 1830.
La primera colectivera (de Buenos Aires) se llamaba Elena. Comenzó a trabajar en ese rubro en 1967.
En un reportaje que le hicieron a Elena, ella aseguró: “siempre me ha gustado el momento en que empecé a manejar, o sea hace alrededor de esto cuatro años atrás. Me entusiasme con el volante”. También destacó que al verla “las reacciones de la gente son muchas, variables, desde luego, las mujeres especialmente. Se asombran y lógicamente con una expresión alegre”.
Podcast (bellasyfuertes): Reproducir en una nueva ventana | Descargar